Tras una serie de cancelaciones que han reducido o están a punto de reducir el número de series que sigo a la mitad, da gusto poder hablar de un estreno que tiene pinta de durar un tiempo y que es lo bastante bueno como para haberme enganchado desde el primer episodio. Se trata de la última apuesta de la HBO para este año. Game of Thrones/Juego de Tronos. La serie basada en la saga de novelas de A Song of Ice and Fire/Canción de Hielo y Fuego escrita por George R. R. Martin. Veamos qué es lo que tiene esta serie que parece haber enganchado a tanta gente.
Antes de seguir debería comentar que aun no me he leído ni una sola de las novelas que forman esta saga, por lo que no sé hasta qué punto la serie es o deja de ser fiel a los libros, si tal personaje es diferente a como lo describía Martin o si han cortado o alterado mucho de la historia para que encaje en la duración de los episodios. Eso se lo dejo a Diógenes para cuando escriba un post sobre los libros que es quien se los ha leído todos. Yo aun estoy en proceso de leer el primero.
Juego de Tronos (A la que han bautizado con el título de la primera de las novelas) como serie, y tratándose de una producción de la HBO tiene, como era de esperar, un aspecto impecable. Atrás han quedado esos tiempos en los que las series de televisión de fantasía tenían ese aspecto cutre y de baratillo, a lo Xena o La leyenda del Buscador, en las que sus personajes parecían ir cosplayeados para asistir a una convención del Warcraft. Aquí desde los escenarios naturales, a los decorados, la vestimenta o las armas, todo parece real. Esos planos del gigantesco muro que hace de frontera con el Norte, las frías llanuras de Invernalia o la majestuosidad de Desembarco del Rey hacen que nos demos cuenta de que se han tomado la historia en serio y que han invertido una buena pasta para que no parezca todo falso. Por fin se estrena una serie de este género que al verla no da la sensación de ser una parodia del mismo.
Eso sí, no es una fantasía al uso. Aquí no hay docenas de brujos buenos y malos, pociones místicas con efectos impredecibles o espadas mágicas que todo lo cortan y que llevan al héroe a un destino épico. Es lo que se ha dado en llamar “Dark Fantasy”. En Juego de Tronos la magia existió en el pasado, también existieron criaturas míticas y todavía quedan por ahí algunos animales que no son de este mundo como los Huargos. Es una curiosa mezcla entre realismo y pequeños toques de fantasía. Que la verdad, tras tantos años de ver plagios de El Señor de los Anillos y Crónicas de la Dragonlance, se agradece.
Resumiendo la serie un poco sin destriparla demasiado. Aquí se nos cuenta la historia de los Siete reinos y de las familias más importantes de estos. Los Baratheon, la familia del actual rey Robert, Los Lannister, la familia de la Reina Cersey, los Targaryen, hijos del antiguo Rey y sobre todo los Stark, la casa que se ha ocupado durante siglos de vigilar el gran muro que hace de frontera con el misterioso Norte y les protege de lo que sea que habite al otro lado. Estos, regidos en la actualidad por Eddar “Ned” Stark, un hombre apegado a las viejas costumbres y con un estricto código de honor y cuya casa parecen ser los únicos decentes en un mundo poblado por manipuladores, asesinos y oportunistas. Este se encuentra interpretado por un Sean Bean que ya se mueve como pez en el agua con este tipo de personajes que amenazan con encasillarle de por vida, aunque no parece estar a disgusto con ello.
En los dos episodios emitidos hasta ahora veremos como una muerte en extrañas circunstancias pone en marcha toda una serie de acontecimientos que obligaran a algunos personajes a abandonar su hogar para cumplir con su deber para con el reino. Unos hermanos tan distintos como la noche y el día capaces unos de sacrificarse por el honor de su familia y otros venderse por el poder y la gloria. Veremos también como otros personajes se nos revelaran como seres egoístas y despiadados dispuestos a cualquier cosa con tal de conservar sus secretos o incluso algunos capaces de sacrificar a su propia sangre con tal de saciar sus ansias de poder. Otra cosa no, pero personajes planos aquí parece haber pocos.
Mención especial merece la intro de la serie. Aquí la HBO, al igual que hizo con Boardwalk Empire o tantas otras, la cadena lo ha dado todo creando una intro memorable. Se nota que al ser una cadena por cable no tienen las restricciones de tiempo que el resto de cadenas y se pueden permitir gastar un minuto o dos en dar una presentación digna a los episodios y no limitarse a mostrar el logo de la serie unos segundos en pantalla como parece ser norma en los últimos años. En Juego de tronos han contado con Angus Wall y su compañía “Elastic” para crear un mapa en forma de esfera del mundo en el que se desarrolla la historia. Sobre este mapa vamos viendo como se nos cuenta la historia de los Siete Reinos mostrándonos como las principales ciudades del mundo van creciendo de la nada como un complicado mecanismo de relojería lleno de engranajes, sin duda aludiendo a las constantes intrigas y maquinaciones de los personajes Todo coronado por un sol encerrado dentro de un astrolabio en el que se nos cuenta la historia de las principales casas familiares de los reinos y acompañado por una música con aires medievales difícil de sacarte de la cabeza. Esta intro además no es inmutable y cambia de vez en cuando dependiendo de lo que se narre en el episodio. Pero mejor que seguir leyendo mis parrafadas es ver la intro y disfrutar de cada segundo de ella.
Así que resumiendo mucho, esta es una serie más que recomendable. Acaba de empezar como quien dice así que es el mejor momento para engancharse a ella y si los libros son la mitad de buenos de lo que se ha visto aquí (que por lo que me han contado son incluso mejores) ya estamos tardando en comenzar a leerlos.