Hace mil años, el mundo se regía por la superstición y la espada. Era una época de oscurantismo, un mundo de terror. La era de las gárgolas. Estatuas de piedra de día, guerreros de noche. Fuimos traicionados por los humanos a los que juramos proteger y transformados en fría piedra durante un milenio por culpa de un hechizo. Ahora, aquí en Manhattan, el hechizo se ha roto y hemos vuelto a la vida. Somos los defensores de la noche. ¡Somos Gárgolas!
Así comenzaba Gargoyles o Gárgolas en España, la que sin duda fue una de las pocas series de animación decentes que surgieron en la tortuosa década de los noventa. Conozcámosla un poco mejor.
Greg Weysman, antiguo profesor de ingles, fue la mente creativa que estuvo tras el éxito de esta serie estrenada en 1994. Se trataba de una producción para la Disney pero que se alejaba bastante de la imagen que uno tiene de las series de esta compañía. Gárgolas tenía un tono oscuro, y no solo porque las características de los protagonistas obligasen a ambientar la mayor parte de las historias por la noche. Esta no era una serie solo para crios, había bastante drama, los personajes sufrían e incluso morían. Debe ser de las poquísimas series en las que se disparaban balas de verdad y los personajes podían ser heridos por ellas. Ahora mismo solo recuerdo otro caso así en Batman: TAS, el otro gran clásico de la animación de los noventa y al que Gárgolas debe muchísimo.
Además del tono oscuro y a ratos realista de la serie, otra cosa que destacaba muchísimo en ella era el gran y acertado uso que hacían de la mitología, la historia y de algunas grandes obras de Shakespeare como Macbeth o El sueño de una noche de verano. Llegando los protagonistas de estas obras a convertirse en secundarios habituales de la serie. Del mundo mitológico vimos desde el despertar del Rey Arturo a combates contra dioses africanos como Anansi o nórdicos como el mismísimo Odin. Viajes por el tiempo a futuros apocalípticos y al distante pasado, visitas a la legendaria Isla de Avalon… Pocos escenarios quedaron fuera del alcance de esta serie.
Los protagonistas de Gárgolas, eran un clan de gárgolas escocesas cuya historia quedaba perfectamente resumida en la introducción que acompañaba a cada episodio. Tras su despertar en el siglo XX en su castillo, ahora parte del rascacielos del billonario David Xanatos, las gárgolas adoptaron nombres basados en la geografía neoyorquina, ya que excepto su líder, Goliath, el resto carecía de nombres propios. Tras esto decidieron continuar con su antigua tradición y se convirtieron en los guardianes de Nueva York enfrentándose a toda clase de amenazas, que en la mejor tradición del comic parecieron multiplicarse con su llegada a la ciudad.
El ya mencionado Goliath, líder del clan era un personaje noble y heroico con un punto sombrío, lo que unido a la forma en la que sus alas se plegaban en torno a su cuerpo como una capa no hacían mas que reforzar la influencia que tuvo Batman sobre esta serie. El resto del llamado clan de Manhattan estaba formado por Hudson, el anterior líder del clan y mentor de Goliath, el único de entre las gárgolas que utilizaba armas. Brooklyn, el segundo al mando en el clan. Un gran estratega y algo sarcástico pero un desastre en sus relaciones amorosas. Lexington o Lex, un enamorado de la ciencia y tecnología actual quien se convirtió en el mecánico del clan. Broadway, una gárgola enorme y de gran apetito amante del cine y que pese a su apariencia torpe y despistada era mucho más inteligente de lo que aparentaba. Bronx, no era exactamente una gárgola, era mas bien el equivalente a un perro dentro de la raza de las gárgolas, no poseía alas ni era capaz de hablar, pero era un inteligente y leal miembro del clan. Ángela era la hija de Goliath y Demona, a quien Goliath encontró en la Isla de Avalon a donde habían sido llevados los huevos no nacidos de su clan tras la masacre en el castillo mil años atrás, acabo abandonando Avalon para establecerse con el clan de Manhattan.
Este clan contaba con algunos aliados entre los humanos. Principalmente la detective de policía Elisa Maza. Una de las primeras personas en descubrir a las gárgolas en Nueva York y que inmediatamente estableció un fuerte lazo de amistad con Goliath, amistad que paso a convertirse en la clásica “tensión sexual no resuelta”. Si, había atracción física interespecies en una serie de Disney, y encima ella era medio negra medio nativo americana. Lo que han cambiado los tiempos. El otro gran aliado humano de las Gárgolas era Matt Bluestone, un ex-agente del FBI trasunto del Agente Mulder, creyente en toda clase de conspiraciones y compañero en la policía de Elisa. Este, tras descubrir la existencia del clan se convirtió en uno de sus más fieles aliados a lo largo de la serie.
Mañana continuaremos con este repaso a Gargoyles analizando a los memorables villanos con los que contaba.