Por Mallister
Pretty Little Liars va de mentirosas que son guapas y pequeñas… y ya está. Pero como tengo que escribir un número considerable de líneas continuaré con el artículo. Bueno, no he sido del todo justa, Pretty Little Liars es también una mezcla entre Gossip Girl y Casper. Y las protagonistas son un grupo de niñas pijas de librillo. De hecho se trata de una serie de televisión basada en una serie de siete novelas (8 en Diciembre) que en un principio iba a ser una serie de televisión. Complicado, ¿eh? Si es que lo de adaptar libros a series parece estar poniéndose de moda últimamente (Trueblood, Vampire Diaries, Dexter…)
La serie comienza con la desaparición de una de las protagonistas, Alison, alias víbora diabólica. Acontecimiento al que sigue la disgregación del grupo, cosa que dura poco tiempo, ya que vuelven a reunirse un año después coincidiendo, como no, con una serie de sucesos extraños.
Las chicas que quedan en pie son:
Es grasioso porque es morena
Aria Montgomery, que además de tener un nombre poco deseable a menos que seas nazi, es hija de Paiper la de Embrujadas, y se lía con un tío aleatorio que acaba de conocer nada más empezar la serie (el cual luego resulta ser su ultra jovencísimo profesor de inglés en el instituto). 
Hanna Marin, mezcla entre Paris Hilton y Winona Ryder (por eso de robar), cuya madre soltera tiene pinta de ser una ninfómana.
Spencer Hastings, la hija perfecta que parece que solo debe estudiar, trabajar y hacer trabajos de caridad. Eso y liarse con todos los novios de su hermana. A mi realmente me parece que les hace un favor, porque la hermana es la cosa más petarda que te puedas echar a la cara.
Y por último (y no por eso más hetero) Emily Fields, la bollera nadadora. La cual, curiosamente, es como un clon de Claire de Héroes solo que en morena. Y yo que creía que desde la charla metafórica de las tijeras entre Claire y Gretchen lo había visto todo…
Hasta aquí es todo más o menos normal, pero no os preocupéis, que enseguida empiezan a pasar cosas raras. De hecho, el mismo día que Aria regresa de Islandia, su amiga desaparecida empieza a enviarles mensajes a todas las del grupo amenazándolas con desvelar sus secretos.
Ah… ¿pero no estaba muerta? De hecho sí, porque encuentran su cadáver a mitad del capítulo piloto. Esa es la gracia, hamijos, por eso lo de Casper. Esa y que todas parecen ocultar un secreto que tiene que ver con una tal Jenna, que a su vez tiene que ver con la desaparecida. Secreto que probablemente no te dirán hasta que acabe o cancelen la serie. Bueno, siempre podéis leeros los siete (para ocho) libros.
En conclusión, mi primera impresión de la serie fue que básicamente era horrenda, pero ahora solo creo que es horrible. Habrá que ver cómo se desarrolla. Por ahora ya tengo teorías facilonas al respecto.
Eso sí, no cabe dudas de que hará las delicias de miles de adolescentes chillonas.