Tras la grata sorpresa que fue La Muerte del Doctor Extraño (que raro se me hace escribir esas palabras) Jed Mackay continua su historia ahora junto con el dibujante Marcelo Ferreira, en una nueva serie regular titulada simplemente «Strange» y que está protagonizada por la nueva Hechicera Suprema, Clea Strange. Una serie que de momento no solo mantiene el buen nivel de la miniserie, sino que esta sirviendo para poner el foco en un personaje clásico muy dejado de lado en los últimos años (o décadas). Así que vamos a ver qué es lo que nos ha ofrecido este primer numero de la serie.
Stephen Extraño ha muerto, pero Extraño sigue protegiendo la dimensión terrestre de todas las amenazas místicas que tratan de aprovechar el supuesto vacío de poder… Mientras trata de devolver a la vida a su esposo. Y es que Clea, con un poco de ayuda póstuma de su difunto marido, ha ocupado la posición de Stephen convirtiéndose en la nueva Hechicera Suprema. Pero como no tardaran en descubrir todos los que creen que el puesto del Doctor Extraño está vacante o que la Tierra ahora es una presa fácil, Clea es una hechicera muy diferente, una Faltine con sangre de guerreros en sus venas, nativa y gobernante de una dimensión brutal que no se detendrá ante nada ni nadie para proteger su hogar de adopción y recuperar al hombre al que ama.
Clea se suma a la larga tradición de los reemplazos que ocupan el lugar de algún personaje importante, algo que como sabemos puede convertirse en un esperpento como sucedió con kyle rayner, o ser un reemplazo orgánico y con sentido como los de Wally West como Flash o Bucky y Sam Wilson como Capitán América; por suerte y por supuesto, Clea entra de lleno en esta categoría. Porque ¿Quién mejor que alguien creada por Stan Lee y Steve Ditko en las paginas de Strange Tales hace casi sesenta años, formando parte de los mitos del Doctor Extraño prácticamente desde el primer día? Un personaje que como señalaba mas arriba había estado demasiado olvidada de forma injusta durante las ultimas décadas y que se merecía regresar ya al primer plano (quien sabe si motivado por su presunta presencia en Multiverse of Madness)
Lo mejor de este primer numero es lo que ya destacábamos de la miniserie que ha servido de prologo a esta serie, que se nota que Jed Mackay ha hecho los deberes y se ha empollado un buen puñado de etapas anteriores, tanto las clásicas como las mas recientes, algo que debería ser la norma pero que como comprobamos demasiado a menudo es mas bien una excepción. Unos deberes que se aprecian en como recurre a elementos del pasado de los personaje para construir lo que se nos cuenta aquí, a la caracterización de estos que apreciamos en esa intima amistad entre Wong y Clea que son casi familia, o la evolución que ha sufrido ésta, que con sus amigos es aquella Clea compasiva y amable de los primeros tiempos pero que con sus enemigos es esa fiera guerrera hija de Umar y sobrina de Dormammu que se ha ganado a pulso los títulos de Hechicera Suprema y gobernante de la Dimensión Oscura.
En esto último es donde apreciamos mejor las diferencias existentes entre Clea y Stephen a la hora de aplicar sus responsabilidades. Tenemos a una Clea casi macarra, que se ha pasado media vida en guerra combatiendo contra su propia familia para garantizar el bienestar de su pueblo, que no solo no se piensa dejar avasallar por nadie (como deja bien claro en este primer numero ante la visita de cierto viejo conocido) sino que sus métodos son bastante mas brutales y expeditivos que los de su por ahora difunto esposo, mas propios de lo que ella se ha visto obligada a ser demasiado a menudo, una señora de la guerra.
Pero diferencias de estilo aparte, con lo que estoy disfrutando mas hasta ahora es con la forma en la que se está tratando la muerte de Stephen Extraño. Por un lado tenemos a Clea decidida a hacer todo lo que este en su mano (y siendo Hechicera Suprema de dos dimensiones diferentes tiene muchísimos recursos a su alcance) para recuperar al hombre que ama con toda su alma, una misión que para ella es casi mas importante que proteger su hogar de adopción. Algo que tras años en los que demasiados equipos creativos han ninguneado o ignorado la relación entre ambos, o han tratado de buscarle a Extraño nuevos intereses románticos en vano, es todo un soplo de aire fresco. Que aunque de los primeros cómics del personaje que me leí se encuentra precisamente aquel en el que Clea abandonaba a Extraño para regresar a su hogar, solo para que este (el muy idiota) se diese cuenta de hasta que punto la quería, para mi Clea y Extraño son una pareja tan icónica como Reed y Sue Richards o Superman y Lois Lane, y ya era hora de que alguien al cargo de la serie opinase igual.
También resulta muy divertido como se juega con lo evidente de que la muerte de Stephen Extraño es algo que no va a durar, que mas temprano que tarde regresará, algo de lo que los propios personajes son conscientes, que la muerte allí tiene unas puertas giratorias. Algo que tiene a Clea (que es bastante optimista teniendo en cuenta la vida que ha llevado) convencida de que es muy posible que Stephen regrese por su cuenta como han hecho incontables de sus aliados y enemigos en el mundo superheroico. Pero no por ello Clea se va a quedar cruzada de brazos esperando, que una cosa es ser optimista y otra ser paciente, aunque no tardara en encontrarse con alguien que no le piensa poner fácil las cosas.
De momento esta nueva serie está siendo de lo más divertida, y aparte de servir para devolver al primer plano a Clea, es de lo más agradable encontrarse con una serie de estos personajes (aunque nos falte de momento Stephen) que sea además de muy disfrutable respetuosa con su historia. Sin nadie queriendo reinventar lo pasado y tratando de demostrar ser mejor que sus antecesores o dejando claro que no conocen más que superficialmente a los personajes, que en la ultima década puedo contar con los dedos de la mano las etapas con las que realmente he disfrutado. Y ahora lo que está por ver es cuanto tardara Clea en reunir a Hulka, Namora y Nova para defender la Tierra.