Cuando la semana pasada reseñamos por aquí el primer numero de Trial of Magneto de Leah Williams y Lukas Werneck ya comentamos que detrás de esta miniserie había un embrollo editorial que tristemente no es algo único o inédito. Lo que si es algo mas inédito. es que al mismo tiempo que se publica una de las personas implicadas hable con bastante detalle de todo lo sucedido, cuando de este tipo de historias nos solemos enterar bastante tiempo después. Algo poco habitual pero necesario, porque aunque en numerosas ocasiones nos hayamos olido que el mal resultado de algún cómic se haya debido a interferencias editoriales que han pasado por encima del equipo creativo, que estas cosas se hagan publicas quizás no ayude a que estas dejen de producirse, pero si a que pensemos mejor sobre quien cargar las culpas. Así que vamos a ver que es lo que ha sucedido detrás del lanzamiento de Trial of Magneto. Y obviamente habrá por aquí numerosos SPOILERS tanto del final de X-Factor como de Trial of Magneto.
Las injerencias editoriales dentro del cómic son tan antiguas como el mismo medio. Unas injerencias que en ocasiones puntuales es cierto que son necesarias y que ayudan a llevar a buen puerto la historia. Pero que cuando uno recuerda que los mejores editores que ha tenido el genero superheroico que es lo que hoy nos ocupa, son aquellos que han trabajado con sus autores y no contra ellos, nos queda claro que esas injerencias deberían ser mínimas y solo en casos extremos. Y ejemplos de esto tenemos a patadas, equipos creativos que se encuentran con que su editor ha aprobado dos proyectos sin caer en la cuenta que en otro cómic se iba a contar prácticamente lo mismo con el mismo personaje, autores a los que apartan de las series en las que se encontraban muy a gusto trabajando para obligarles a lanzar alguna franquicia o personaje poco vendible o que tienen que luchar contra sus editores para no cambiar por completo lo que querían contar porque estos han tenido una idea “mejor”. Ejemplos que en muchos casos suelen acabar con dichos autores largándose de la editorial en cuanto termina su contrato para dedicarse a publicar sus propios cómics con libertad absoluta.
Y lo que ha sucedido con el final de X-Factor y el comienzo de Trial of Magneto es algo que también nos hemos encontrado en numerosísimas ocasiones, que un equipo creativo tenia una idea para una saga en la serie en la que se encontraban trabajando y que gusta tanto a sus superiores que acaban convirtiéndola en un megaevento con infinidad de crossovers, tie-ins y ramificaciones varias. Esto es algo que todos nos olíamos que había sucedido en este caso concreto al comprobar que tras el abrupto cierre de X-Factor los personajes de la serie iban a ser los co-protagonistas de la miniserie acerca del Juicio de Magneto y que Leah Williams iba a seguir escribiéndoles aquí.
Pero a diferencia de en ocasiones anteriores, donde todo esto lo tenemos que asumir a partir de como se desarrollan los hechos y comentarios velados de las personas implicadas, aquí todo ha estado mas claro que nunca. Ya con el apresurado ultimo numero de X-Factor, donde al mismo tiempo que se plantaba el prologo a Trial of Magneto se cerraban a toda prisa todas las tramas pendientes de la serie, quedaba claro que esto no había sido un cierre planificado con tiempo. Algo que quedaba aun mas claro cuando una leía al final del mismo las cartas de despedida de Leah Williams y David Baldeón, donde no resultaba difícil adivinar que esto había sido una cancelación apresurada de ultima hora.
Pero como decía mas arriba esto era lo habitual en estos casos, unir piezas sueltas de un puzle para tratar de adivinar que había sucedido. Lo que hace este caso diferente a otros es que aquí Leah Williams, con el primer numero de Trial of Magneto prácticamente recién salido de imprenta, contó en una entrevista con todo lujo de detalles (en el podcast Battle of The Atom) lo que había sucedido con su serie. Como sucede demasiado a menudo en esta industria, a sus superiores les gusto mucho la idea que quería contar acerca del asesinato de La Bruja Escarlata (personaje que ahora gracias al MCU esta mas de moda que nunca) y su investigación a cargo de X-Factor, tanto que pensaron que lo mejor era contarlo en una miniserie aparte ya que consideraban que las cifras de ventas de X-Factor no eran lo bastante altas para contar una historia así. Y esto en principio no hubiera sido un problema de no ser porque decidieron también que ya no tenia sentido mantener abierta dicha serie y que esta seria cancelada en su numero 10, algo de lo que Leah Williams se entero cuando estaba escribiendo el numero 9.
Y dado que Williams y Baldeón tenían planificado comenzar a contar la historia de Wanda y Magneto a partir del numero 15 de la serie, y desarrollar y concluir en los números intermedios las tramas que habían ido iniciando desde el comienzo de la serie, se encontraron de pronto con que tenían que arreglárselas para que el numero 10 de la serie cerrase de alguna forma todos los cabos sueltos y además dar comienzo a Trial of Magneto. Algo que de por si ya era complicado, meter el contenido de lo que iban a ser seis cómics en solo dos mas el “prologo” de la miniserie donde se continuaría la historia, que se volvió aun mas cuando esas injerencias editoriales continuaron.
Porque ese ultimo numero de X-Factor no fue solamente un producto apresurado por las presiones editoriales, sino que se convirtió en una especie de monstruo de frankenstein en el que metió mano muchísima gente, en el que junto a David Baldeón también dibujaron paginas Lukas Werneck y David Messina y cuyo resultado final fue algo que sorprendió incluso a Leah Williams. Según ha contado ella en la entrevista no supo de los cambios que había sufrido el cómic hasta que este se publicó y pudo leerlo, con algunos de sus diálogos cambiados, con paginas redibujadas diferentes a lo que le habían enseñado antes de su publicación e incluso otras que no había visto jamás.
Cambios y nuevas escenas escritas por algún autor o editor anónimo y que incluían momentos que ella no había escrito y con los que no estaba nada conforme, cambios en algunos casos de tan mal gusto, como el contar que Prodigy había sido victima de una violación y asesinato y mostrar de forma explicita su cadáver desnudo en el sótano de su asesino, una escena esta ultima que se ha llegado a retocar para la versión digital. Unas injerencias que no se quedaron ahí y que llegaron incluso a la carta de despedida que preparó para el final de la serie, carta que tuvo que reescribir varias veces ya que en las primeras versiones resultaba demasiado evidente que todo esto había sido una cancelación de ultima hora y desde la editorial querían transmitir la idea de que todo había estado planificado, como si no resultase evidente que no era así simplemente leyendo el cómic.
Williams también añadió que aunque ella misma reconoce que al trabajar con personajes propiedad de grandes empresas estas pueden hacer con sus propiedades lo que quieren, estos deberían aprender a respetar de una vez a sus empleados, que esta decisión no ha venido de algún ejecutivo que no sabría distinguir un cómic de otro, sino de editores que trabajan estrechamente con esos autores (o deberían) y que deberían tratarles como algo mas que simples engranajes intercambiables de una maquina. Y esta experiencia ha debido ser tan dolorosa que los planes de Leah Williams para después. de Trial of Magneto pasan por marcharse a Substack (aunque esa cosa no me da muy buena espina) como tantos otros de sus compañeros de profesión (que no se si en Marvel querrían seguir contando con ella después. de haber contado con todo esto) para crear sus propios cómics, aprovechando la popularidad que le ha dado el trabajar en los títulos de mutantes.
Y aunque X-Factor era un cómic algo irregular, pero con muchas buenas ideas y potencial, es una serie que voy a echar de menos, que dentro de todo este caos krakoano del que parece que no nos vamos a librar a corto plazo, era de las pocas series que seguía con ganas. En cuanto a Leah Williams espero que al menos en Trial of Magneto le dejen contar la historia que quería contar (aunque visto los precedentes lo dudo), cómic del que ella ha dicho también en esta entrevista que merezca el haber tenido que pasar por todo lo que ha pasado con la cancelación de X-Factor y que tanto ella como David Baldeón tengan suerte en sus futuros proyectos y no tengan que volver a sufrir esas malas practicas editoriales que mucho me temo que son endémicas.