Pues con la tontería ya estamos en primavera y con eso ya sabéis lo que toca, los eventos veraniegos. En Marvel hay eventos, eventitos y eventetes. Esta semana empezará Empyre, que es el evento gordo, mientras que todavía dura un eventito de Iron Man llamado Iron Age y otro eventete llamado Outlawed. Eso sin olvidar lo que están haciendo con los mutantes, pero de eso ya hablaremos luego porque, para no variar, les gusta dar el cante y acaparar toda la atención y eso tampoco es. Así que vamos con Empyre…
Poco se sabe de Empyre más allá de que es una suerte de secuela espiritual de Maximum Security o Invasión, con el giro de tuerca de que en esta ocasión los Krees -que como ya sabéis, son escoria – y los Skrull -que según Byrne son como animales y los odia- deciden dejar de lado sus rencillas para unirse bajo el Emperador Hulkling -sí, el de Young Avengers- e invadir la Tierra. Ya, ya lo sé, la idea es totalmente loca y puede que parezca no tener ningún sentido, pero el evento lo llevan Dan Slott y Al Ewing, dos tipos que quieras que no suelen tener algo de cabeza, y el apartado gráfico viene a cargo de los mismos de HoX/Pox, Pepe Larraz y RB Silva, con lo que tiene toda la pinta de que es Empyre el evento gordo de Marvel para este año, así que digo yo que algo de interesante ya tendrá. O no.
Por su parte, Iron Age es un eventito que gira alrededor de la serie de Iron Man, en la cual se ha venido a descubrir que en realidad Tony Stark está muerto y lo que vemos por ahi pululando es una IA a la que le da un Bender y se pone a luchar por los derechos de las personas sintéticas, dándole por hacer ataques terroristas y llevarse bien con el Hombre Máquina -que desde Nextwave él si que es Bender con todas las letras- Alkhema y todo tipo de adefesios basados en el silicio. Frente a ellos está Arno Stark, el mismísimo Iron Man 2020 creado por el innombrable y que asomaba de vez en cuando en los 80, y aleteando alrededor del evento también tenemos a otros personajes como Máquina de Guerra, Ironheart o una nueva encarnación de Force Works a cargo de Matt Rosenberg que como todo lo que hace este hombre merece la pena echarle un vistazo, porque no es lo que uno podría esperarse. Por lo demás, el grueso de Iron Age es bastante prescindible y poco interesante en general, sobre todo por una narración atropellada a la que no ayuda en absoluto la incoherencia de que en Iron Man la Tierra Marvel parezca Humans, la serie aquella británica en la que iphones convivían con androides hiperdesarrollados, mientras que en Vengadores ni se comente el tema y en Spiderman la Tierra todavía trate de parecerse a la realidad -aunque la realidad ahora mismo esté superando a la ficción, que le vamos a hacer-.
Y con esto llegamos al eventete, Outlawed, que viene a ser algo así como el el Civil War de los pobres; la cosa empieza igual, con los Champions teniendo un cagadón de relaciones públicas que tiene como consecuencia el que se apruebe una ley según la cual los menores de edad no pueden ser superhéroes. Y con la tontería resurgen Los Nuevos Guerreros -¡los héroes de los 90, la nueva generación!- hay un relanzamiento de Champions y hasta se recupera a Power Pack, que no sé que pintará en todo esto cuando a estas alturas creo que hasta Katie Power tiene derecho al voto. El eventete en cuestión viene a cargo de Eve Ewing -que es la guionista de Champions y que hasta ahora solo ha guionizado cómics sobre la chavalería adolescente de Marvel como el Kamala Team Up o Ironheart- y por lo demás pues bueno, no he echado en absoluto de menos a la copia de los Nuevos Titanes que perpetró Nicieza en los 90 y considero que Power Pack es una serie que perfectamente podrían seguir haciendo Simonson y Brigman hoy en día, así que tampoco me emociona que vuelvan los Power Pack «creciditos».
Vale, toca hablar de los mutantes y X of Swords, que viene a ser un evento veraniego del que todavía no se ha publicado casi nada más allá de una imagen promocional de Mark Brooks en la que todo quisque -o más bien diez mutantes, que hay que seguir usando la X- lleva una espada para «un enfrentamiento contra un enemigo místico que forjará el destino de los mutantes». A cargo de todo ello sigue estando Jonathan Hickman y yo que sé quién más, pero me alegro de ver a Illyana con una espada alma normal y no con el adefesio ese de Cloud Strife que le diseñó Bachalo. Por lo demás, ni idea de que va esto, así que poco puedo deciros.
Por lo demás, nada nuevo bajo el sol. No me cansaré de repetir que la gran fuerza que tenían en tiempos estos eventos era el hecho de que le hacían creer al lector que las cosas que ocurrían en ellos importaban, que tenían consecuencias, y eso se lograba a base de mantener la coherencia entre unas series y otras. Ya en tiempos, cuando coleccionábamos como locos todos los cómics de Inferno, había ocasiones en las que despreciabas una u otra entrega porque te daba la impresión de que no iba a ser importante para la historia principal, pero hoy en día casi como que puedes prescindir del evento entero porque lo que a ti te interesa es zutanito man y en su serie ni lo van a mencionar. Ahora bien, me pregunto si en Krakoa tendrán también la vacuna del coronavirus…