A lo largo de esta semana hemos visto los orígenes de Thanos, sus mas grandes historias, las mas grotescas y un pequeño recordatorio de que no todos los autores han sido capaces de aprovechar al máximo el potencial del personaje. Pero hoy toca un ejemplo de lo contrario, de ver a un escritor que si que ha sido capaz de aprovechar ese potencial y de ofrecernos una historia que aunque juega con los esquemas del pasado es capaz de ofrecernos algo diferente que sin estar a la altura de los clásicos es una buena muestra de que con Thanos aun quedan muchas buenas historias que contar. Así que vamos a echarle un ojo a la ultima etapa del personaje para ver que hicieron con el Donny Cates y Geoff Shaw para salirse un poco de lo habitual. Y cuidado que hay SPOILERS de esta ultima etapa por todas partes, así que mejor leerse esa etapa y entonces volver al blog.
Tras recuperar su poder y su lugar en el Universo Thanos busca un nuevo desafío, algo que le haga sentirse el mismo de nuevo, pero todo lo que encuentra esta muy por debajo de el. Al menos es así hasta que un desafío llama literalmente a sus puertas en la inesperada forma de un nuevo y misterioso Motorista Fantasma imbuido con el fuego del infierno y el Poder Cósmico de los Heraldos de Galactus, un Motorista que no sirve ni a demonios ni devoradores de mundos sino a un amo que requiere de la presencia de Thanos y que no aceptara un no por respuesta. Una exigencia que aunque Thanos no esta dispuesto a aceptar acaba viéndose arrastrado contra su voluntad solo para descubrir que es difícil resistir a una invitación como esta cuando es uno mismo quien se la hace.
Son muchas las historias que han insinuado, cuando no dicho de forma directa, que el mayor enemigo de Thanos es el propio Thanos. Que cada vez que ha obtenido el poder absoluto, se ha saboteado a si mismo de forma inconsciente para perderlo al considerarse indigno del mismo. Algo que aquí Donny Cates ha tomado de forma literal para enfrentar al Thanos que conocemos contra el Thanos de un lejanisimo futuro en el que este ha ganado. Ya no quedan mas mundos que destruir o enemigos que derrotar (o casi). Thanos es el vencedor absoluto en un universo reducido a cenizas para mayor gloria de su amada Muerte, una destrucción absoluta que obedece sencillamente a un ultimo y desesperado intento de conquistar su amor de una vez por todas.
Cates juega con la idea de ese Thanos que actúa como un adolescente enamorado dispuesto a todo, incluso a lo inimaginable, para conquistar un amor que lleva milenios resistiendosele. Pero en lugar de repetir la historia de siempre nos muestra a un Thanos (el “joven”) que esta cansado de esos juegos, de correr detrás de la Muerte como un perrillo mendigando su atención, y que al ver en lo que se ha convertido/convertirá siente desprecio por si mismo y jura hacer todo lo que este en su mano para evitar convertirse en ese rey de nada.
Y aquí es donde entra en juego eso que mencionábamos antes de que Thanos es su propio mayor enemigo, ya que el Thanos del futuro, quien había traído a su yo mas joven para que le matase, ya que solo aceptaba morir por su propia mano y solo en la muerte podía reunirse con su amada. Una acción que (como no) se vuelve en su contra con ese Thanos joven que no solo le niega su deseo, dejando a su yo futuro una vez mas sin conseguir su objetivo de conquistar a la muerte, sino que cumple su empeño de erradicarle de la existencia haciendo que tantos millones de años de conquista y destrucción hayan sido en vano. De nuevo Thanos ha ganado aunque a costa de derrotarse a si mismo.
Tras la gran etapa de Jeff Lemire no creía que Donny Cates, quien para mi era entonces un completo desconocido, fuese capaz de estar a la altura. Pero con esta historia(y su trabajo con el Doctor Extraño) me ha dejado claro no solo que estamos ante un guionista mas que prometedor, sino que con Thanos aun se pueden contar nuevas historias que se salgan de la norma y que se pueden utilizar los viejos esquemas sin tener que repetirlos de forma aburrida y repetitiva.
Y aunque nos han quedado en el tintero muchas grandes historias de Thanos de las que hablar, con esto creo que ha sido un aperitivo mas que suficiente para lo que nos espera a partir de mañana sábado en los cines, cuando por fin podremos comprobar si el Thanos de Josh Brolin y los hermanos Russo esta a la altura de lo mejor del personaje y estamos ante una de esas adaptaciones de las de quitarse el sombrero. Pero eso ya lo veremos este fin de semana y seguramente hablaremos por aquí la semana que viene.