Jurassic World es casi la secuela que nadie esperaba, porque a estas alturas casi merecía más la pena hacer directamente un remake. Hay que tener en cuenta que ya han pasado 27 años desde la primera parte y 14 desde la tercera, y la gente de Spielberg ha tenido muchísimos problemas para sacar una secuela adelante. Pero no se sabe como, al final lo han conseguido. Y el resultado es más remake que secuela…
Porque mucho se ha hablado de que si los dinosaurios cantaban, que si a estas alturas lo que tocaba era sacar dinosaurios con plumas y no lagartos gigantes o que el Indominus Rex es un espanto y que no deja de ser un velocirraptor gigante y albino. Vale, de acuerdo, ¿pero alguien se ha dado cuenta de que el guión de Jurassic World es clavadito al de Jurassic Park? Tienes dos niños visitando el parque cuyos padres estan a punto de divorciarse, un familiar de esos niños al mando del parque, tienes a un pseudo indiana jones experto en dinosaurios siendo escéptico sobre el parque y hasta tienes una escena bajo la lluvia de un dinosaurio enorme escapándose, los niños perdidos durante buena parte de la película y al Tiranosaurio Rex salvando a los protagonistas al final de la película, ¿se puede ser más parecida a la original?
Lo que ha pasado realmente con esta película es que estaban todos acojonados. Totalmente acojonados, nadie se atrevía a hacer una secuela de Jurassic Park porque veían que nada estaba a la altura de la película original, con lo que han decidido aparentar que se han vuelto locos y sacarte en todos los trailers a Chris Pratt domando velocirraptores, pero a la hora de la verdad te vuelven a contar la misma historia de capitalistas desalmados a los que les sale el tiro por la culata mientras intentan jugar a dios. Volvemos a tener a una organización ajena al parque intentando sacar tajada del asunto de forma un tanto turbia y dando pie con ello a gran parte de los desastres de la película, volviendo a dar el mensaje de que «la culpa es de los humanos, lo demás sólo es la naturaleza abriéndose camino». Como si la naturaleza de por sí no fuera ya a menudo una hija de la gran puta, vaya.
Tengo que admitir que nunca he sido un gran fan de Parque Jurásico, no deja de ser una película de aventuras con dinosaurios para pasar el rato, pero ni de lejos me parece una película comparable a las verdaderas obras maestras de Spielberg (En Busca del Arca Perdida, Tiburón, La Lista de Schlinder). Así que igual soy más escéptico y más puñetero con los defectos de Jurassic World, porque le veo todo el cartón y eso me encabrona. Aun así tengo que admitir que no me extraña que tuviera éxito, porque hay historias que siempre funcionan y esta película ha sabido volver a contar esa historia de maravilla, sin molestarse en buscar más aspiraciones. Al final todo el mundo sabía que la película buena de este año era Mad Max, y el que no lo supiera es porque todavía no la ha visto…