El otro día analizábamos lo que había sido el desastroso paso de Tom DeFalco por la serie de Thor. Dicho análisis terminaba con el regreso del autentico Dios del Trueno y la recompensa de Eric Masterson por parte de Odin consistente en un nuevo martillo mágico. ¿Pero qué fue de Eric tras dejar la serie de Thor? ¿Se fue al limbo de los héroes olvidados? ¿Cayo en manos de un autor serio que supo sacarle todo su potencial? Por desgracia nada de eso sucedió. Eric Masterson siguió en manos de sus creadores, DeFalco y Frenz, y consiguió serie propia en unos tiempos en los que estaban de moda las versiones cabreadas y violentas de los héroes de siempre. Veamos que fue de este hijo de los 90 llamado Thunderstrike.
¡Llegan los noventa!
Al igual que su compañero de promoción Maquina de Guerra, Eric también consiguió serie propia, no como el pobre USAgente que siempre fue el hermano pobre de estos dos. Eric había comenzado su carrera como nuevo héroe con las pintas que había tenido en su corta etapa como sustituto de Thor y su nueva maza encantada. Pero claro, la gente no paraba de confundirle con el Dios del Trueno, algo normal cuando ves a un tío de dos metros y pico vestido de azul y amarillo con una capa roja, melena rubia, casco con alas y martillo mágico. Así que Eric decidió que era hora de cambiar de imagen, y ya que era un hijo de los 90 lo seria con todas sus consecuencias…
Así que se puso en manos de una estilista que renovó su aspecto… de aquella manera. Fuera la capa, fuera el casco, ¿Antifaz? ¡¿Para qué?! ¡Si tu cuerpo se transforma dejándote irreconocible! Se recogió el pelo en una coleta, reemplazo sus botas asgardianas por unas botas de cuero marrón y le añadió un chaleco, siempre desabrochado, del mismo cuero. ¿El resultado? Inenarrable. Si con este rediseño querían dejar claro de qué época era el comic lo consiguieron con creces. Podrán pasar varias décadas y el traje seguirá identificándole de forma inconfundible con esa que algunos llaman la edad oscura de los comics.
¿Donde esta la policia del buen gusto cuando se la necesita?
Así que de pronto teníamos a un “Thor” urbano, uno que conectaba con los problemas de la gente y cuya principal preocupación no eran los Gigantes de Hielo o los malvados planes de Surtur. Thunderstrike se enfrentaba a traficantes de droga, a pederastas, y también a los villanos de cuarta fila que Defalco iba creando. Grandes personajes como el Agente Cero, Carjack o Bisonte, mas algún que otro clásico como el Juggernaut. Pero si de entre todo ellos destaco alguno, ese fue hacha Sangrienta, el mortal que poseído por el hacha de Skurge el Ejecutor se había transformado en un remedo de Spawn o algo así y cuya identidad permaneció como un misterio hasta el final de la serie.
Las ventas no acompañaban y había que cerrar el chiringuito, y DeFalco en lugar de dejar al personaje pro ahí para que algún autor con más talento fuese capaz de desarrollar todo el potencial del personaje lo que hizo fue matarlo. ¿Y cómo matabas a un héroe en los años 90? Pues haciéndole un Parallax. Así que tras derrotar a hacha Sangrienta Eric decidió conservar el hacha encantado, lo que le llevo a transformarse en ¡Evil Thunderstrike!
¡Llevo cadenas, una marca en un ojo y una sola hombrera! ¡Soy malvado! ¡Y el primer Ultimate Avenger! ¡Y encima hago llorar a Walter Simonson!
En tan solo dos números asistimos al triste espectáculo de ver como los vengadores de la época trataban de contener al ahora malvado Eric. Un par de ostias por aquí, un par de ostias por allá y en esto que aparece el verdadero Thor. Odin andaba preocupado y envió a su hijo a Midgard para que detuviese al poseído Thunderstrike en lo que se supone que debía ser una épica batalla tanto en el plano físico como en el espiritual, pero no quedo gran cosa, De hecho, y aunque me cueste decirlo… ¡Ron Marz lo hizo mejor en Green Lantern! Aunque no mucho mejor.
Así que Thunderstrike murió, pero como estaba escrito en su martillo, “El mundo aun necesita héroes” (La inscripcion del Mjolnir molaba mas) Asi que un día, décadas más tarde (hace unos pocos meses), ese martillo encantado volvió a caer en las manos de Tom DeFalco y Ron Frenz quienes se lo dieron a un nuevo mortal para que fuese el segundo Thunderstrike. Pero eso será una historia para otro día…