Saludos hermanos desteñidos. He sido convocado a este blog para participar en lo que el blanquito al cargo de esto ha dado en llamar “Semana negra” aunque nosotros hubiésemos preferido llamarla Afro-Septenario, pero me estoy yendo por las ramas (¡Y que nadie haga chistes sobre que los negros somos como los monos!)
Esta semana ha comenzado hablando de negros molones, aunque me temo que la lista aportada por el señor Pantarujez ha sido tan escasa como su pigmentación. Que si, que Pantera Negra mola un huevo (de chocolate). Que Luke Cage es la leche (con cacao) Y que don Samuel L. Jackson es poco menos que un Dios tallado en ébano. Pero hablar de negros molones y olvidarse de uno de los más importantes no tiene perdón de Anansi. Nos estamos refiriendo como no a don Willard Christopher Smith Jr, Will para los amigos.
Este hermano ha conseguido pasar de unos orígenes humildes a ser una superestrella. Es el único actor de la historia en conseguir ocho películas consecutivas que generasen más de 100 millones de dólares en la taquilla nacional, además de ser el único actor que tiene ocho filmes consecutivos en el número uno (Si, lo he plagiado de la wikipedia) Pero nos importan estos datos? Tanto nos importa el dinero? Es que somos concejales de Urbanismo? Lo realmente importante de Will es su papel como “Ennegrecedor” de películas.
Su carrera ennegreciendo películas comenzó en 1995 con el estreno de Bad Boys. Con este mismo título se había estrenado ya una película en 1983 en la que Sean Penn interpretaba a un niñato blanco gilipollas que cometía delitos y terminaba en la cárcel pegándole una paliza al Kurgan, (lo que por otra parte demostraba que Christopher Lambert era una nenaza)
Después de esto el de la nariz rota se rapo la cabeza, se compro una espada e hizo la única película buena de Christopher Lambert.
Vamos, que peor ejemplo no podía dar esta película, por suerte llego Will y la mejoro todo:
Aquí pasamos a tener un protagonista respetuoso con la ley y que mete en la cárcel a los delincuentes. ¡Esto sí que es un ejemplo para la juventud!
Dos años más tarde rodo Men in Black, película basada en el comic de mismo nombre creado por Lowell Cunningham, un señor que pego un pelotazo y desde entonces se dedica a tocarse los huevos. En esta película, Will interpreta al agente J que en el comic era tal que así:
Y que Will convirtió en esto:
¿Es o no es una mejora? Un soso comic independiente acerca de dos tíos blancos que persiguen minorías se convierte en una película molona solo con la presencia de Will.
¡¡Si hasta tuvo video musical!!
Pero no se detuvo aquí la carrera de Will, dos años más tarde estreno Wild Wild West, película que contaba las aventuras de Jim West, un agente del servicio secreto que luchaba contra los malvados ayudado por un inventor. Esta película estaba basada en una serie de televisión del mismo nombre de los años sesenta. En aquellos tiempos Jim West era así.
Y la serie era tal que así…
Emocionante a más no poder, casi he sufrido un infarto al ver la acción trepidante que transmite esta intro…
Por suerte Will Consiguió convertirlo en esto:
¡Acción! ¡Emoción! ¡Tiros! ¡Explosiones! ¡Tías Buenas! ¡Y una canción molona!
Will siguió su buena racha en el 2002 retomando su papel de Agente J en la secuela de Men in Black, donde repetía la formula de hacernos olvidar al blanco soso del comic.
Y también tuvo un video musical!
Un año más tarde nos encontramos con otra secuela, Bad Boys II, en la que volvía con la formula de la anterior y conseguía que nos olvidásemos por completo de Sean Penn.
Si hasta consiguen infiltrarse en el Ku Kux Klan!! Son los putos amos!
En el 2004 nos encontramos con su siguiente película ennegrecida, Yo Robot. Esta película está basada en el libro del mismo nombre escrito por Isaac Asimov, en el se nos cuenta como una señora llamada Susan Calvin, que es robo-psicóloga se dedica a charlar con robots que funcionan mal…que si vas a hacer un corto independiente siguiendo el estilo dogma y lo llevas al festival de Sundance pues igual no queda mal este argumento, pero no venderías una mierda, por suerte llego Will y mejoro el concepto.
Así era la protagonista del libro:
Y así es el protagonista de la película:
Ostias! Tiros! Robots Malvados! Si Asimov levantase la cabeza besaría a Will Smith!
En 2005 nos encontramos con el proyecto más difícil de su carrera, convertir esto en una película decente:
Y vaya que sí lo consiguió, pasamos de una película protagonizada por el indio más hortera de Nueva Delhi
A esto:
Si es que todo lo que toca este hombre lo convierte en oro.
Tardamos dos años más en encontrar su siguiente trabajo ennegrecedor, Soy Leyenda. Esta película está basada en un libro del mismo nombre escrito por Richard Matheson y que ya tuvo dos adaptaciones en el pasado:
“The last man on earth” con Vincent Price
Y “The Omega Man” con Charlton Heston
Por suerte para nosotros Will lo arreglo todo:
En 2008 nos sorprendió con Hancock, una película sobre un tío que llega de otro planeta, que tiene superpoderes y que lucha contra el mal ¿A alguien le suena la historia? ¡SI! ¡Hancock es el Superman Negro!
Con Will pasamos de un héroe así:
A uno así:
¿Viendo esto qué clase de héroe te gustaría que admirasen tus hijos?
De momento esta ha sido la última incursión de Will Smith en su dura tarea de mejorar historias aportando su toque de color, pero no debemos temer por el futuro, la cantera está asegurada. No hay más que ver cómo era Karate Kid en 1984:
Y como es Karate Kid ahora:
Si, se trata de Jeden Smith, el hijo de Will Smith, que ha empezado a seguir temprano a seguir los pasos de su padre. Desde aquí solo podemos desearle el mayor de los éxitos y atrevernos a sugerirle que una nueva versión de solo en casa podría ser lo que necesita su carrera para reafirmarse.