Por aquí solemos tener temas recurrentes de los que por desgracia parece que nunca podemos dejar de hablar, cosas que suceden periódicamente y a las que nadie parece capaz (o no quieren) poner solución, y tras meses, o incluso años, el vaso se vuelve a llenar y toca cabrearse un poco, escribir algo para desahogarse y ver como todo sigue igual… Y como tras una rápida búsqueda en google me he encontrado con que la última vez que en Brainstomping le dedicamos un artículo entero al cagamos en los crossovers fue en 2014, creo que ya va siendo hora de volverlo a hacer. Porque lo único que ha cambiado desde entonces es que estoy un poco más harto de ellos que hace dos años. Aunque antes de entrar en materia me gustaría advertir a los lectores de que a continuación probablemente van a leer argumentos leídos aquí incontables veces, pero como cada vez estoy más convencido de que la gente solo nos lee para vernos cabreados igual a nadie le importa eso.
Seguro que no soy el único que alguna vez se ha sentido así
Lo que me ha motivado a sacar de nuevo el tema es un artículo que he leído hace unos días y que hacia un pequeño análisis de cómo habían evolucionado las ventas de los crossovers comparadas con las que tuvo en su momento las primeras Civil War de Marvel en 2006. Como suele suceder en estos casos la mayoría de las series de la editorial se vieron implicadas en el crossover, unas de forma más directa que otras, pero el resultado fue en muchos casos el mismo, bastó con estampar el logo del evento en la portada para que las ventas de esas series se disparasen. El éxito de esto provocó lo que era de esperar, la explotación hasta el hartazgo de esta fórmula para tratar de repetir el éxito de ventas.
Y eso que por aquí no somos muy fans de esta historia
Y si digo hartazgo es porque eso es lo que parece haber sucedido a día de hoy, donde Marvel ha aprovechado la coincidencia del décimo aniversario del evento original con el estreno de la tercera entrega cinematográfica del Capitán América que toma prestado su subtítulo y parte de la trama de dicho evento, para lanzar esa especie de secuela del mismo titulada de forma poco original como Civil War II, un intento de repetir la fórmula que no está consiguiendo el éxito de su predecesor. Porque ni el tirón de la saga original ni el del compartir título con una película taquillera ha conseguido que las ventas de todo lo que rodea a este evento (cuya serie principal sí que está funcionando bien pese a los retrasos) se acerquen ni remotamente a lo que sucedió en 2006.
Y pensaban que podrían ordeñar de nuevo una vaca que lleva diez años reseca
Si miramos el top100 de Diamond del pasado mes de Agosto, aparte de encontrarnos con que no hubo comics del evento principal (o ya puestos que Marvel solo ocupa uno de los diez primeros puestos siendo los demás títulos de DC) podemos ver que lo más arriba que encontramos relacionado con Civil War es el especial The Fallen en el puesto 41, y que ni tan siquiera las miniseries que llevan el título de Civil War por delante consiguen alcanzar la mitad superior de la tabla (el mejor situado es el Civil War II: Amazing Spider-Man #3 en el puesto 65) ¿Y que ha podido pasar para que las cosas cambien tanto en estos años? Pues mi teoría, explicada lisa y llanamente, es que la gente está hasta los huevos.
Sabemos que esto no es del todo fiable, que eso solo contabiliza las ventas a libreros y no las ventas finales y que no están incluidas las ventas digitales, pero aun así no es una buena señal
Yo no sé cómo lo llevaran los demás, pero yo estoy cansado de que todos los años muchos de los comics que leo se vean interrumpidos por el evento de turno y los guionistas se vean obligados a meter, muchas veces con calzador, en la trama de su serie algo que la relacione aunque sea vagamente con el crossover que toque ese mes. Esto no solo perjudica a los autores que ven como el ritmo de su historia se altera al tener que meter elementos ajenos (y a veces ellos mismos acaban hasta los huevos y se largan cansados de tanta interferencia editorial), sino que perjudica al lector que se encuentra con que en el comic que leía de pronto le meten una trama que quizás no le interesaba en absoluto y con la que no le queda más remedio que tragar o dejar de comprar durante unos meses sus comics favoritos.
Esto sucede cada vez mas a menudo
Esto no es nada nuevo claro está, cosas así las he estado vendo desde los tiempos de Crisis en Tierras Infinitas, donde podías encontrarte el logo de la saga en la portada y en el interior del comic ver que el protagonista comentaba en alguna viñeta lo raro que era ver los cielos de color rojo, o algo igual de tenue, y seguir adelante con su historia como si nada. Y esos niveles de desvergüenza no es que hayan disminuido precisamente, no todos son tan descarados, pero sí que nos encontramos con demasiados comics cuya relación con el crossover de turno a veces termina en la portada. Pero a diferencia de otros problemas de los que adolece el comic de superhéroes actualmente este sí que parece tener una solución simple y que ya se está poniendo en práctica…
Y esto es todo el contenido relacionado con Crisis que tuvo este numero del All-Star Squadron
Básicamente el público parece haber decidido que está cansado de todo esto y está votando con su cartera negándose a comprar buena parte de estos títulos, un método muchísimo más efectivo que el de quejarse en Internet (ejem). Una bajada de ventas la de estos crossovers forzados con la que están enviando un mensaje claro a la editorial, este tipo de maniobras ya no funcionan. El problema está en si en las altas esferas de las editoriales habrá gente capaz de pillar el mensaje o pensaran que el problema es que no han saturado lo suficiente el mercado y para el próximo crossover de turno nos encontraremos con muchísimos más especiales, miniseries, tie-ins y demás morralla, que tristemente les creo capaces.
No ha sido tan dramático pero ojala lo fuese
Yo hora mismo debo decir que me encuentro bastante contento de ver como las ventas de todo lo que rodea a estas Civil War II están siendo bastante malas, y me alegraría aún más si fuese un estrepitoso fracaso, porque parece que esa es la única manera de que todo esto cambie. Así que ahora me siento lo bastante optimista como para esperar que esta vez sí que aprendan la lección y los próximos eventos consistirán en una mini/maxi serie independiente sin crossovers ni tie-ins más allá de las series regulares de los personajes directamente implicados. Pero en el fondo me temo que si esto llega a suceder no va a ser precisamente a corto plazo y que nos tocara sufrir unos cuantos años más de poner en pausa muchas lecturas habituales hasta que pase el jaleo de turno.