Almost Human – Karl Urban y su androide contra el crimen del futuro

Karl Urban se ha convertido en una cara muy conocida dentro de la Ciencia-Ficción/Fantasía. Le hemos podido ver en series y películas como Xena, La trilogía del Señor de los Anillos, Doom, Las Crónicas de Riddick y Priest entre otras. Y más recientemente le hemos visto en el relanzamiento de Star Trek, donde interpreta al Doctor McCoy, y Dredd, donde se ponía el casco (y no se lo quitaba) del famoso Juez de Megacity-1. A esta carrera ahora hay que sumarle su más reciente trabajo, la serie de televisión futurista de la Fox “Almost Human”, serie de la productora de J. J. Abrams y creada por J. H. Wyman, antiguo productor ejecutivo y guionista de Fringe. ¿Vale la pena la serie? Pues habiendo visto los dos primeros episodios, puedo decir que de momento no ha empezado nada mal.

Ciencia-ficción con buena pinta en televisión… parece cosa de ciencia-ficción…

En Almost Human nos encontramos en el año 2048, las desigualdades sociales han aumentado a la par que los avances científicos y la tasa de criminalidad ha subido un 400%. En este futuro tan violento los policías cuentan con una nueva arma a su disposición, los androides de combate. Estos androides, o sintéticos, de la serie MX que acompañan a los policías son fríos y lógicos, maquinas andantes muy eficientes a su manera y que pueden realizar tareas demasiado peligrosas para los agentes humanos. Pero durante una emboscada que la asociación criminal y terrorista Insyndicate le tiende al equipo del detective John Kennex (Karl Urban), todos sus hombres son asesinados y el perderá una pierna y permanecerá en coma durante casi dos años, algo de lo que culpara a la “lógica” de los MX.

Seguro que así empezaron en las doce colonias de Kobol antes de que todo se saliese de madre…

Cuando el Detective Kennex se reincorpora al servicio solo tendrá un objetivo en mente, desmantelar Insyndicate y averiguar cuáles son sus verdaderos objetivos. Aunque su regreso al trabajo contara con la desconfianza de muchos de sus compañeros, quienes le culpan de la muerte de sus hombres, y tendrá también problemas tanto para lidiar con su nueva pierna biónica como con la idea de tener que trabajar a la fuerza con un MX, algo que se ha vuelto obligatorio durante el tiempo que permaneció en coma. Pero tras perder “accidentalmente” a su nuevo compañero sintético su Capitán le asignara un nuevo compañero algo diferente. En lugar de otro modelo MX, su nuevo compañero será Dorian, un modelo antiguo de la serie DRN, androides que en su día fueron apartados del servicio ya que su programación les hacia tan humanos que llegaban a tener emociones y que traerá de cabeza a Kennex.

Humano con partes bionicas, androide con emociones… los dos son «casi humanos/almost human» 

La pareja protagonista recuerda a ratos a la formada por Elijah Baley y Daneel R. Olivaw en las novelas de Asimov (aunque Diógenes saltara enseguida con que se parecen más a “Mac and C.H.E.E.S.E.”), y es que Almost Human no deja de ser un “buddy movie” policíaco de toda la vida, con dos compañeros de distinto origen que en principio no parecen congeniar pero que sabemos desde el principio que acabaran siendo grandes amigos, aunque en esta ocasión no han querido estirar demasiado el tópico y los han hecho amigos enseguida. El mundo en el que se mueven tampoco es especialmente original, con una sociedad dividida por un muro que separa la parte ultramoderna de la ciudad de la parte mas sórdida y peligrosa. Casi como si fuese Megacity-1, solo que la parte exterior de la ciudad en lugar de ser un desierto radioactivo es un suburbio con una estética sospechosamente deudora de Blade Runner…

Y porque no debían tener presupuesto para meter coches voladores…

Pero pese a que la serie igual no es la más original del mundo, es divertida y funciona. Karl Urban está muy bien en su papel de policía duro y amargado (y que gran Nick Furia se ha perdido Marvel) Y se nota que a Karl Urban disfruta bastante este tipo de trabajos, algo que no es de extrañar sabiendo que era muy fan de la serie clásica de Star Trek, lo que le hizo perseguir de forma activa hacerse con el papel de “Bones” McCoy, o que en su infancia leía comics del Juez Dredd, y que aunque el contrato no le hubiese obligado, no quería quitarse el casco en la película porque Dredd jamás lo haría. La química con su compañero androide funciona, aunque Dorian a veces sea tan humano que te olvides de que su personaje es un androide, pero claro, se supone que esa es la idea. La organización misteriosa con planes aun más misteriosos a la que se enfrentan, aunque es algo que ya hemos visto mil veces, siempre da mucho juego si está bien utilizada. Y lo que de momento están utilizando bastante bien son los cambios producidos en la sociedad por culpa de los avances cientificos.

-Eh Kennex, tu amigo me ha llamado pellejudo…-

Así que de momento la serie ha conseguido ganarse mi interés, y no solo por la sequía de productos de este tipo que suele haber en la televisión. Es una de esas series que no empieza mal y que puede acabar siendo algo muy entretenido como Continuum, pero también corre el serio peligro de estancarse en la dinámica de “el caso de la semana” y acabar siendo un NCIS con robots. Pero yo de momento tengo confianza en la serie, que peor empezó Arrow y ha terminado por convertirse en una de las series que con más ganas espero cada semana. El tiempo nos dirá si Almost Human consigue ganarse un huequecito entre la buena ciencia-ficción televisiva.