En estos tiempos el mercado del cómic digital ha crecido de forma espectacular, gracias en parte a la apuesta que han hecho por este método de publicación grandes editoriales como Marvel, DC o Image entre otras. Aunque este método de publicación no esta exento de polémicas como hemos podido ver con el caso del ultimo numero de Saga, ya que digitalmente o impresos, los autores siguen dependiendo del dictado de las editoriales. Pero hay alguien que se ha rebelado contra este sistema y se lo ha montado por su cuenta, así que ya va siendo hora de que hablemos del chiringuito que se ha montado Mark Waid en Thrillbent.
Thrillbent fue creado hace casi un año por Mark Waid y John Rogers (Productor de cine y tv) como una forma de hacer algo diferente en el mundo del cómic un experimento a la hora de publicar cómics. Ellos no querían limitarse a adaptar de cualquier manera los cómics pensados para un formato físico como ya hacían el resto de editoriales, así que estos se publicarían solo de forma digital y ya creados teniendo en mente el medio digital. Así que empezaron a publicar cómics en formato panorámico a los que les añadían efectos que solo se podían dar en este ya no tan nuevo medio digital. Pero este nuevo experimento, que le costó a Waid el tener que vender su colección de cómics no estuvo exento de polémica, ya que en su momento fue acusado por algunos libreros de pretender acabar con el cómic impreso y por extensión con su forma de ganarse la vida. Pero de eso ya hablamos por aquí en su día.
Pero este “experimento” tiene otra particularidad más de la que aun no he hablado, todos estos cómics son gratis, completamente gratis. Y no solo puedes leerlos tranquilamente en el navegador, debajo de cada cómic se encuentran los enlaces para descargarlo en PDF o en CBZ para que puedas leerlos cómodamente cuando no dispongas de una conexión a internet. Pero si todo esto es gratis ¿Cuál es el modelo de negocio de esta gente? Pues uno algo similar al que están utilizando Brian K. Vaughan y Marcos Martin con su “Private Eye”. Solo que Waid en lugar de poner un botón de Paypal lo que ha hecho es poner uno de sus cómics, “Insufferable”, disponible en Comixology y en ComicsPlus ofreciendo pequeños recopilatorios con portadas nuevas y material extra disponible solo en la versión de pago.
Si, pese a la gran variedad de la oferta disponible en Thrillbent, de momento solo uno de sus cómics el que escribe el mismo, se encuentra disponible en plataformas de pago, siendo el resto de lectura únicamente gratuita. No conozco las cifras de ventas y no sé cómo le estará funcionando todo esto económicamente. Es posible que pese a todas sus buenas intenciones e ideas este experimento no acabe de funcionar y acaben teniendo que cerrarlo. Que mucha gente pensara que si ya lo pueden leer gratis en la web del creador para que van a pagar, teniendo que confiar únicamente en la buena voluntad de quienes quieran darle su apoyo.
Y sería una pena que Thrillbent desapareciese, ya que hasta ahora su oferta no es solo bastante variada, sino de bastante calidad. La temática de los mismos no podía ser más heterogénea y al no ser un mercado tan cerrado como el impreso y el no depender en principio de las ventas está permitiendo a los autores tener bastante libertad a la hora de contar sus historias. Allí encontramos desde esa mirada desencantada hacia los superhéroes que tenemos en “Insufferable” a historias de zombis como “Luther“ que le dan cien mil patadas a “Walking Dead” pasando por parodias de esta última, y con mucha mala leche, como los “Walking Pandas”. También hay ciencia ficción como la de “City of the Dead” (donde recuperamos a Karl Kesel) o la de «Arcanum«, dramas como “The Damnation of Charlie Wormwood”, terror, humor… Otra cosa no, pero variedad tiene de sobras.
Así que desde aquí no nos queda ya más que volver a desearle suerte con este proyecto a Mark Waid y a sus compañeros de viaje para que nos sigan ofreciendo tanta calidad como hasta ahora y que de paso vayan recuperando a esos autores como Kark Kesel que a día de hoy, y de forma injusta, no encuentran su sitio en la industria pese a lo mucho que aun tienen que ofrecer.