Vamos a ver, que levante la mano el que no sepa quién es Karen Berger. ¿Ninguno? ¿Seguro? Da igual, por si acaso hay alguno haciéndose el despistado, que sepa que es la mejor editora que ha pasado por DC Comics, y probablemente uno de los dos mejores editores de cómics vivo, con una habilidad para cazar talento increíble (y estoy hablando de gente como Alan Moore, Neil Gaiman, Garth Ennis, Grant Morrison…). No hay un editor que haya hecho los milagros que ha hecho esta señora en DC Comics que, sorteando la política corporativa de una editorial que tradicionalmente ha sido de las más restrictivas de la industria, ha conseguido dar rienda suelta a la creatividad de montones de autores que han llegado a ser profesionales bajo su guardia, «cazando» algunos de los talentos más importantes de los últimos años y creando el modelo editorial a seguir por cualquier profesional del sector. Otra cosa es que luego haya gente que no lo siga como Dan Didio, pero es que el chico es así…
Y de que Karen Berger se va de la editorial para la que ha trabajado durante 33 años nos hemos enterado por una nota de prensa, nada más. Es verdad que ya nos lo olíamos cuando a alguna mente poco pensante de DC decidió cancelar Hellblazer, el buque insignia de Vertigo durante casi 25 años. Karen se va en marzo -justo en el momento en el que se publique el último número de Hellblazer- después de un periodo de tiempo insultantemente largo en el que parecía que se le hacía mobbing constantemente; no es normal en una editora de la habilidad de Berger dejar escapar a gente con tanto talento como Brian Wood o que Vertigo se hubiera visto reducida en los últimos tiempos a un sello testimonial en el que se publicaban Fables, American Vampire y Hellblazer. Por no hablar de series 100% Vertigo como Lot13 que salen fuera del sello, dejando a la línea en un limbo editorial muy sospechoso sobre todo teniendo en cuenta que en los últimos tiempos Berger ya no rendía cuentas directamente a la presidenta de DC, si no un elemento de tomo y lomo como Bob Harras.
¿Y que va a hacer Karen Berger? Según dice la nota de prensa de DC «buscar un cambio profesional para perseguir nuevas oportunidades», que es lo mismo que decir que va a seguir en el negocio pero ya no en DC. Lo mismo se monta su propia editorial (de sobra puede) o acaba en Dark Horse, Image, Boom, Dynamite o incluso en Marvel, pretendientes no le van a faltar. El caso de Marvel es bastante probable desde el momento en el que su editor jefe actual y algunos más son antiguos editores de Vertigo que se pasaron a la competencia por obra y gracia de Joe Quesada; la estrategia de Marvel desde finales de los 90 ha sido pescar en Vertigo todo lo posible, con lo que el cazar a Berger sería completar la colección. Y, por supuesto, permitiría a Marvel/Disney convertirse en un monstruo intratable a largo plazo.
¿Que le queda a DC? Bueno, aparte de que con esto acaban de liquidar todo lo que quedaba de la vieja guardia de Paul Levitz (la de los cómics de los 80/90, que son los que hicieron fans de la compañía a muchos de los lectores actuales), de momento no dicen que vayan a cancelar Vertigo, pero el que una barra de pan no lleve fecha de caducidad no quiere decir que te la puedas comer tranquilamente el mes que viene. La editorial piensa homenajear los 33 años de Karen Berger en la compañía y Diane Nelson, la presidenta de DC de la que nunca se habla pero tanto mal hace, ha dicho que esta muy agradecida, que le va a dar un reloj de oro y blablabla (bueno, lo del reloj de oro no lo dijo, pero sólo le faltaba). Por lo demás, otros «jefazos» como Didio, Johns o Lee (o el competente entre los competentísimos Harras) ni asoman en la nota de prensa. Teniendo en cuenta que tienen pinta de tener (gran) parte de culpa de lo que ha pasado, no me extrañaría que hayan preferido guardar ese discreto silencio por pudor. O porque toda la jeta que tienen ya la gastan con los guiones de Phantom Stranger, vete a saber…