A estas alturas de la película hablar de Robert Anson Heinlein es como hablar de Mark Twain, siempre te suena él o alguna de sus obras y presupones que algo bueno debio escribir. Por eso, cualquiera que lea/vea Tropas del Espacio y luego lea Forastero en Tierra Extraña, se quedará un pelín confuso; Tropas del Espacio es un canto al militarismo, «Forastero…» es un canto al amor libre que sirvió de libro de cabecera de muchos hippies.
Pues son el mismo perro con distinto collar. Y es que mientras «Tropas..» es muy directa en su planteamiento militarista, llevandolo hasta tal extremo que bordea lo satírico, Forastero en Tierra Extraña es un canto a ponernos en pelotas y follarnos unos a otros. Aunque sólo superficialmente. Me explicaré:
Forastero en Tierra Extraña es la historia de Michael (Mike) Valentine Smith, el primer hombre nacido en Marte y criado por marcianos. A lo largo de las páginas del libro veremos como va asimilando la cultura humana y descubriendo formas de adaptarse a ella, compartiendo de paso la filosofía marciana con la gente que se va encontrando por el camino. Lo importante aquí es fijarnos en que el personaje de Mike es un superhombre en todas las acepciones posibles; el haber sido criado/entrenado por los marcianos le hace disponer de unos poderes mentales al más puro estilo Jean Grey, y a la vez su forma de ver el mundo esta libre de toda atadura y es un superhombre al estilo Nietzsche que esta más allá del bien y del mal, de hecho a lo largo del libro va forjando su propia ética.
Al leer el libro, nos encontraremos con una serie de contenidos más o menos episodicos en los que el protagonismo de la historia va oscilando entre los distintos personajes que se cruzan con Mike; desde la enfermera de la que se hace «hermano de agua» de forma accidental hasta el reportero que juega a ET y trata de liberar al extraterrestre de las malvadas garras de las oscuras agencias del gobierno. Todo esto ocurriría más o menos en la etapa de «infancia humana» del personaje, que más o menos duraría la mitad del libro. Más tarde, nos encontraremos una etapa de adolescencia en la que el personaje empieza un viaje iniciatico, etapa en la que el libro tampoco se detiene mucho porque rapidamente pasa ya a la etapa de madurez, en la que Mike trata de ocupar su lugar en el mundo.
Edición de la Biblioteca de Ciencia Ficción Orbis, años 80. Probablemente la mejor colección del género en España.
Pero basta de reventar la historia. «Forastero…» no me ha dejado buenas sensaciones. Es cierto que es innovador para su época, y cuestiona sin tapujos muchos tabús de su época (sobre todo los sexuales) pero su discurso acaba resultando un tanto vacío y, sin spoilearos nada, diré que en último término la ética revolucionaría que nos ofrece este marciano humano es, en esencia, una cosa fallida, rancia y enormemente parecida a la de algunos que vinieron mucho antes que él. Por no hablar de las concesiones que hace a ciertos aspectos «metafísicos», haciendo que los personajes vean como «algo bueno» el matar a seres humanos «incorrectos» porque «van a reencarnarse y tener una oportunidad para eliminar su incorrección». Hala, di que sí. Si será facha el tio…
Y por eso digo que Heinlein me deja dudando igual que en Tropas del Espacio; en los dos libros todos los personajes están locos y aceptan como bueno algo que para el lector queda total y absolutamente claro que es perverso. Siendo Heinlein como fue (aun en su etapa más fachorra) un defensor de la libertad de pensamiento del individuo, ¿cómo puede escribir estos dos cantos al pensamiento único, al sacrificar el yo en favor del colectivo? No olvidemos que estamos hablando de libros escritos en plena Guerra Fría, cuando lo «colectivo» era sinónimo de comunismo…
¿Es una buena novela? Estoy en dudas, porque creo que el grueso del libro es más efectismo que otra cosa. La osadía del escritor no quita que la novela se detenga en detalles totalmente anecdóticos, que los personajes en muchos casos sólo sean arquetipos sin mucho desarrollo (probablemente el más desarrollado sea Jubal Hernshaw, y es una Mary Sue infame) con lo que uno se pregunta como es posible que una novela tan mala le haya acabado interesando tanto. Un fenómeno curioso, este Forastero en Tierra Extraña.